La Nena de Gràcia: auténtica, acogedora y deliciosa

chocolate caliente La Nena

En catalán y en español «Nena» es el nombre afectuoso que se le da a una niña o a una chica. Pues bien, en el corazón de una calle del bohemio barrio de Gràcia, se encuentra una «Nena» sorprendente, bien plantada, con un encanto natural increíble al que seguramente sucumbirás.

De hecho, esta Nena es una alegre mezcla de chocolatería, cafetería y salón de té. Algunas pequeñas mesas de alturas diferentes instaladas delante de la puerta y ya está todo dicho: el mobiliario dispar de la Nena se adapta a su clientela, gente de todas las edades.

La Nena es agradable

Aquí el ambiente es relajado y te sirven con una sonrisa en los labios ¡No es de extrañar que la Nena tenga clientes fijos! Enseguida nos da la impresión de estar en el salón de una casa para las vacaciones en la que cada generación encuentra su sitio sin problema. De hecho, aquí te incitan cordialmente a compartir mesa con otros clientes si lo deseas.

la nena zona dedicada a los niños

En la primera sala hay unas estanterías repletas de juguetes antiguos y por encima se ven fotos de niños, así se logra dar un encantador estilo vintage al lugar. Al fondo, detrás del mostrador, hay un viejo piano por si algún amante de la música se decide a tocarlo.

La segunda sala espera a los que están en edad de crecer con su cocinita y las estanterías abarrotadas de libros y juguetes: una suerte para los padres, que podrán dejar que los niños se muevan a su aire.

la nena estanterías

La Nena es apetitosa

La Nena es sana y 100 % natural

Todos los productos son naturales y proceden de la agricultura ecológica. Aquí, la mantequilla tiene un sabor auténtico, la nata es muy fresca y los pasteles son caseros. El té y el café se hacen con agua mineral, el chocolate, con leche fresca y  los cafés son arábigos al cien por cien y ecológicos.

¡En la Nena no hay alcohol que valga! En la primera sala, al fondo, hay un gran letrero que lo deja bien claro.

la-nena plato de ensalada y embutido

Si te encantan los zumos de fruta o de verdura fresca, tendrás donde elegir: los hay de naranja, limón, pomelo, manzana, plátano, zanahoria, remolacha, apio…

¿Te atraen más los sabores exóticos? Entonces prueba los cócteles a base de naranja o de manzana y fruta tropical. El precio varía entre 3 y 4 euros.

A la Nena le gusta lo salado

¿Te apetece comer algo para matar el gusanillo? La nena se encarga de todo. La carta es muy variada y sirven buenas raciones. Si no te lo acabas todo, te puedes llevar lo que sobra a casa.

A cualquier hora del día podrás tomar bocadillos (entrepans), o probar las rebanadas de pan artesano (torrades), normales o tostadas, la verdura, el queso y el jamón, las quiches y las crepes (entre 4,50 y 6 euros). La Nena es de origen francés y eso se nota en la cocina.

la-nena pan gratinado y tomate

La Nena es canela fina

Su gran especialidad: el chocolate (xocolata) en todas sus versiones (entre 2,50 y 4 euros): a la taza (auténtico chocolate muy espeso) o suizo (con nata por encima), ruso (con una bola de helado de vainilla), brasileño (con helado de café) o francés (más líquido). Si no sabes si tomar café o chocolate, no pasa nada, la Nena te servirá algo muy original: un choco-café (xococafè).

El chocolate te lo sirven con un churro y tú puedes añadirle bizcochos de soletilla (melindros), bollos o pastas.

  • No nos cansaremos de recomendarte los postres caseros expuestos en el mostrador del bar: pasteles de manzana, de pera, de limón, de zanahorias y almendras, de queso y de chocolate.
  • Nosotros hemos probado el pastel de limón y nos ha gustado mucho, se deshace en la boca. ¡Pero tener que escoger es un dilema porque todo está buenísimo!

Bueno, ya te lo puedes imaginar, esta clase de merienda no es precisamente lo que se dice de régimen pero, así, te gastarás menos en la cena o te la saltarás directamente…

La Nena trabaja todos los días

La Nena tiene éxito a todas horas del día pero sobre todo a la hora de la merienda y los fines de semana, ya que el local abre los domingos. Un consejo: ven pronto porque si no hay mucha gente, el local suele estar lleno.

¡Ay, Nena, está claro, los tienes a todos engatusados!

¡Mil gracias a Claudia, una nena a la que aprecio mucho! Ella es quien me ha hecho descubrir este lugar tan entrañable.

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