La Palmera: auténtica cocina local renovada

Situado en la esquina de la calle Mallorca y la arbolada avenida de Enric Granados, el restaurante barcelonés La Palmera va viento en popa desde hace más de veinte años. En sus inicios hizo oficio de charcutería y tienda de platos preparados, pero el local se fue transformado poco a poco, al ritmo que marcaban propietarios y clientes, hasta convertirse en un restaurante famoso por su cocina de excelente calidad. ¿Qué tipo de cocina? Platos mediterráneos renovados por el chef y una carta elaborada con productos frescos y de temporada.

La Palmera: el lugar

Seguro que quedarás prendado de la primera sala. Este lugar se parece más a una antigua y bonita bodega que a una sala de restaurante convencional, con paredes de ladrillo a la vista, los estantes enrejados llenos de buena botellas de vino y el mobiliario tipo bistrot.

Te recomendamos que comas en esta sala: el ambiente es muy agradable y la decoración, muy cuidada. No te olvides de reservar con antelación.

Hay una sala contigua, más clásica, con las paredes de color albaricoque, en la que se pueden instalar varios comensales.

• Cuando hace buen tiempo, puedes comer en la terraza que hay en la calle, delante del restaurante.

Ell menu degustación de la Palmera

No dudes en pedir este menú de la Palmera; podrás probarlo a la hora del almuerzo, de lunes a sábado.

• Un buen plan: Este menú degustación a menos de 27 euros, lo puedes tomar también los sábados a partir de las 13h, y por la noche, a partir de las 20h30, de lunes a jueves (excepto la víspera de días festivos). Pocos son los restaurantes que, como La Palmera, proponen menús el fin de semana o a la hora de la cena; es una propuesta muy interesante en esos casos.

Esta propuesta consiste en un amplio surtido de platos locales a los que el chef aporta su toque creativo.

Se compone de:

• 3 pequeños entrantes
• 3 pequeños platos principales
• pan con tomate
• una bebida
• 1 postre
• 1 café

Este copioso menú de degustación de la Palmera cambia cada quince días ¡Bravo! ¡Así no nos cansamos de comer siempre lo mismo!