Plaça Reial: una de las plazas más bonitas de Barcelona
La Plaça Reial es una de las plazas más emblemáticas de Barcelona. También es una de las más bellas: sus proporciones perfectas, su ristra de majestuosos soportales, sus farolas finamente esculpidas y sus bonitas palmeras son extremadamente fotogénicas.
Con vistas a las Ramblas, la Plaça Reial está situada en el Barrio Gótico. Sin embargo, su arquitectura no tiene nada que ver con la de las calles circundantes, ya que posee una estética clásica del siglo XIX.
La historia de la Plaça Reial
Donde hoy se levanta la Plaça Reial, había un convento de capuchinos. En 1835, fue destruido por un incendio y la ciudad proyectó construir allí un teatro. Se organizó un concurso de arquitectos, pero el teatro del Liceo se inauguró antes de que se pudieran elaborar los planos. Situado en las Ramblas, a pocos metros de distancia, hizo que el teatro en ciernes perdiera su razón de ser y se abandonó el proyecto.
En el centro iba a construirse un edificio en honor de los reyes católicos (de ahí el nombre de Plaza Real), pero nunca vio la luz. Fue sustituido por una fuente de fabricación francesa: la Fuente de las Tres Gracias.
De estilo neoclásico, la plaza atrajo a las clases acomodadas de la ciudad, que adoraban su ambiente animado y elegante. Bajo los soportales, que protegían a los visitantes del calor, se instalaron numerosos cafés y restaurantes. Con el tiempo, la Plaça Reial se hizo más popular.
Los atractivos de la Plaza Real
Arte y arquitectura
La Plaça Reial es tan bella porque su arquitecto se esforzó en reforzar su simetría mediante dos sorprendentes trampantojos. En primer lugar, diseñó la plaza en forma de trapecio en lugar de rectángulo. En segundo lugar, utilizó diferentes distancias entre las columnas en función de su ubicación.
También puedes admirar en la plaza uno de los primeros proyectos de Gaudí: las farolas. Uno de sus temas favoritos era la identidad catalana. En la parte superior de las farolas se puede ver un casco con un dragón, que recuerda las conquistas catalanas de la Edad Media.
Escenas callejeras
La Plaça Reial es un lugar interesante para observar el ajetreo del barrio. Es un lugar fascinante donde siempre pasa algo: un restaurante que monta su terraza, un grupo de amigos que se reúnen, vasos que tintinean, turistas sentados en la fuente central… ¡Un auténtico espectáculo callejero!
Vida nocturna
Cuando llega la noche, la Plaça Reial nunca está vacía. Los numerosos bares y restaurantes están en constante ebullición, aunque la mayoría de los visitantes son turistas y extranjeros.
Una de las principales atracciones de la plaza al anochecer es el Jamboree. Aquí puedes disfrutar de un concierto de jazz de primera clase, un espectáculo de flamenco o bailar toda la noche en la discoteca.
Kabul Party, un albergue juvenil de ambiente animado para mochileros de todo el mundo, está en el número 17 de la plaza. Su terraza del quinto piso ofrece una hermosa vista de las palmeras.
¡Cuidado con las trampas para turistas!
La Plaça Reial es muy bonita y atrae a un gran número de turistas. Por desgracia, esto ha provocado una cierta pérdida de autenticidad de las tiendas de la plaza, aunque no se pueda comparar con las Ramblas.
Si buscas un lugar acogedor y popular entre los catalanes, el sitio al que debes ir es L’Ocaña . Auténtica institución barcelonesa, este bar/restaurante siempre ha destacado por su originalidad. No en vano debe su nombre a Ocaña, un famoso travesti emblemático de la contracultura urbana de la Barcelona del siglo XX.
Ten en cuenta que los precios son a veces más altos que la media en todos los establecimientos de la Plaça Reial. Hay que pagar por un entorno tan bonito…