Plaza Cataluña: la plaza más grande y centrica de Barcelona
La Plaza Cataluña es el centro neurálgico de Barcelona, ya que une el casco antiguo de la ciudad con el Eixample y, desde ella, parten algunas de las vías más representativas de la ciudad condal, como la Rambla, el Passeig de Gràcia o la Rambla de Catalunya.
La Plaza de Cataluña sirve como punto de encuentro para locales y también es donde se celebran, a lo largo del año, conciertos, actos públicos y actividades varias, muchas de ellas familiares.
Historia de la Plaza Catalunya
La Plaça Catalunya se construyó en el año 1889, un año después de la Exposición Universal de Barcelona, justo en lo que fueron las afueras de la ciudad antes de que se derribaran las murallas y se empezara a construir el Eixample.
Aunque hubo varias propuestas, fue el Plan Rovira de 1859 el que sugirió convertir toda esa área en una plaza que funcionara como centro de la ciudad. Como curiosidad, este plan entró en conflicto con el Plan Cerdà, donde el puesto de centro lo ocupaba la plaza de las Glorias, otro lugar muy popular que visitar en Barcelona actualmente.
Finalmente, en 1862 el Ayuntamiento ordenó que ese espacio empezara a urbanizarse como plaza, aunque no fue hasta 1889 que se consiguió el permiso oficial para hacerlo, ya que hasta ese momento se habían construido casas y otras edificaciones, las cuales tuvieron que ser expropiadas.
¿Quién la diseñó?
La construcción de la Plaza Catalunya fue un proceso largo y en ella participaron varios arquitectos. El primero de ellos fue Pere Falqués, que fue el que propuso ajardinar la zona y crear dos grandes vías en forma de aspa y una plaza circular que sirviera como punto de intersección.
Después el proyecto lo continuó Josep Puig i Cadafalch, que fue sustituido por Francesc Nebot cuando llegó la dictadura de Primo de Rivera, quien presentó un diseño muy parecido al de Puig i Cadafalch.
Sin embargo, Francesc Nebot acabó dimitiendo y pasó a ser sustituido por Joaquim Llansó, Josep Cabestany y Nicolás María Rubió Tudurí, que llevarían a la plaza a como se la conoce hoy en día, con las esculturas de Josep Clarà, Josep Llimona y otros artistas.
La inauguración de la Plaza de Cataluña de Barcelona tuvo lugar el 2 de noviembre de 1927 por parte de Alfonso XIII.
¿Qué hacer en Plaza Catalunya?
La Plaza Cataluña se ha convertido en un punto de encuentro para los locales y en un lugar donde se llevan a cabo numerosas actividades, muchas de ellas durante las fiestas navideñas, y conciertos a lo largo del año.
También es uno de los lugares más animados que visitar en Barcelona, tanto de día, que está custodiada por cientos de palomas, como de noche, cuando se ilumina y se crea un ambiente precioso.
La plaza se encuentra rodeada de hoteles, como el Olivia Plaza, un precioso hotel boutique; o el popular Iberostar, que tiene una terraza y un sky bar desde donde se pueden disfrutar de unas vistas preciosas de la Plaza Catalunya y sus alrededores. También hay restaurantes y bares, siendo el café Zúrich uno de los más míticos por considerarse el corazón de la ciudad y su kilómetro cero.
Por los alrededores de Plaça Catalunya también hay numerosas tiendas, algunas de ellas muy populares, como Primark, Desigual y Apple Store; y centros comerciales, como el Corte Inglés y el Triangle, que es donde se encuentra la FNAC y el Sephora con su famoso tobogán.
Pero lo mejor de todo es que de ella parten algunas de las calles más representativas de Barcelona, como Las Ramblas, que conectan la plaza con el puerto a través de un agradable paseo entre tiendas y lugares tan emblemáticos como el Mercado de La Boquería o el Liceu; y el Passeig de Gràcia, donde se encuentran algunas de las tiendas más lujosas de la ciudad y edificios de gran interés artístico e histórico, como la Casa Batlló y La Pedrera-Casa Milà, que son obra del famoso arquitecto catalán Antoni Gaudí.
También cabe destacar la Rambla de Cataluña, llena de terrazas; y la Avenida de Portal del Àngel, la calle Pelayo, las rondas de Universidad y de Sant Pere, donde pueden encontrarse tiendas y restaurantes.
Si la Plaza de Cataluña se considera el corazón de la ciudad y uno de los lugares turísticos por excelencia es porque, además de todo lo mencionado hasta ahora, toca con algunos de los barrios más conocidos y populares de la ciudad, como el Raval, el Eixample y el barrio gótico. Justo a este último se le considera una de las zonas más bonitas de Barcelona.
Aquí pueden visitarse la catedral de Santa Eulàlia, conocida también como la Catedral de Barcelona, o la plaza Sant Jaume, que es donde se encuentran el Ayuntamiento y el Palacio de la Generalitat de Catalunya.
Debajo de la Plaça de Catalunya se encuentra la Oficina de Información de Turismo de Barcelona, donde además de información se puede recoger la Barcelona Card, que da acceso a numerosas actividades culturales y monumentos a un coste reducido. También permite usar el transporte público de forma gratuita y da una serie de ventajas exclusivas en algunos comercios, entre otras ventajas
¿Cómo llegar a Plaza Catalunya?
A la Plaza de Cataluña de Barcelona se puede llegar en transporte público sin problemas, ya que conecta con las principales estaciones ferroviarias de la ciudad a través de su línea de metro o autobús.
Las líneas de metro que llevan hasta Plaza Catalunya son la roja o L1 y la verde o L3.
También se puede llegar en taxi desde cualquier punto de la ciudad.
¿Cómo ir de Plaza Catalunya al aeropuerto?
Ir de la Plaza de Cataluña al aeropuerto o hacer el trayecto inverso es también muy sencillo y hay varias opciones.
Una de las formas más prácticas es cogiendo el Aerobús, que conecta algunos de los puntos más importantes de la ciudad de Barcelona, entre ellos la Plaza Cataluña, con el aeropuerto.
Otra opción es ir en tren, aunque en este caso será necesario ir de Plaça Catalunya hasta la estación de Paseo de Gracia o Barcelona Sants, que son las más cercanas, y, desde ahí, coger el tren hasta el aeropuerto.
También existe la posibilidad de ir en taxi, ya que en Plaza de Cataluña hay parada de taxis. Aunque esta es una de las opciones claramente más cómodas, también es una de las más caras.
¿Dónde aparcar en Plaza Catalunya?
En caso de no querer hacer uso de transporte público y alquilar un coche para poder conocer la ciudad con total libertad o en caso de llegar a Barcelona con tu propio coche, debes saber que aparcar no es sencillo.
Se trata del centro de Barcelona, por lo que el aparcamiento escasea, además de que hay áreas en las que no está permitido estacionar, las pocas plazas que hay están reservadas para residentes o son de pago.
Sin embargo, puedes consultar esta página web para encontrar dónde aparcar en Plaça de Catalunya y no perder tiempo del viaje.
