Fin de semana gastronómico en Barcelona: un viaje para el paladar

¿Eres un(a) aventurero(a) culinario(a)?  ¡En Barcelona estarás servido(a)! Te esperan nuevos sabores repartidos por toda la ciudad. ¡Síguenos!

Un alojamiento para sibaritas

Encontrar alojamiento es la primera etapa de tu viaje gastronómico, porque como se suele decir, el sueño hace olvidar el hambre.

Un hotel-panadería

El desayuno es la comida más importante del día , por lo que te aconsejamos que duermas en el Praktik Bakery, un hotel que tiene algo muy especial: ¡está situado en… una panadería!

Hoteles de lujo con restaurantes

¡Si deseas más intimidad y confort, no te faltarán opciones! El hotel Cram tiene un restaurante con estrella: Angle.

¿Prefieres un hotel de estilo modernista? Seguro que te encantará el hotel España, la decoración es espectacular. El restaurante no tiene estrella pero el chef que lo dirige cuenta con 7 estrellas Michelin en su haber.

Visitas para sibaritas durante un fin de semana gastronómico

Déjate llevar mientras realizas una visita con guía, será un verdadero viaje sensorial. Si deseas más información, lee el artículo Barcelona gastronómica: una visita guiada para descubrir la ciudad con los 5 sentidos.

Paseos por los mercados

¡Para empezar bien el día, no hay nada mejor que visitar los magníficos mercados de la ciudad! El mercado de la Boquería es el más famoso, pero también merece la pena pasarse por otros mercados, puedes echar un vistazo a nuestro artículo sobre los 5 mejores mercados de Barcelona.

Visita del museo del chocolate

Otra visita barcelonesa para los más sibaritas: el museo del chocolate. Pasarás un momento agradable (¡sobre todo si vas con niños!) y aprenderás la tira de cosas sobre la historia del chocolate, su transformación y su comercialización.

Compras sabrosas

Si vienes a Barcelona a pasar un fin de semana gastronómico, seguramente querrás comprar productos delicatessen , ¿No? Bueno, pues no pasa nada! Estamos seguros de que, de todas formas, te  gustará descubrir las tiendas de los sibaritas barceloneses.

El jamón ibérico de Barcelona

Después de haber llevado a cabo un extraordinario trabajo de investigación, de degustación intensa y de escrupulosos tests en laboratorio, hemos declarado a Andreu la mejor tienda de jamón de Barcelona.

Turrones y chocolates artesanos

En Barcelona, los turrones y el chocolate ocupan un lugar de honor en el paisaje gastronómico. Saborea el resultado de esos conocimientos únicos y especializados en las mejores chocolaterías de Barcelona o en las tiendas de turrones artesanos. ¡La elección es difícil!

Gastronomía e historia en la Casa Gispert

Asegúrate de que te queda tiempo para ir a la Casa Gispert. Además de frutos secos de gran calidad, esta tienda te propone un auténtico viaje al pasado dado que conserva su decoración intacta desde 1851.

El templo del vino y del queso

Termina tu excursión gastronómica visitando la tienda Vila Viniteca. ¡Más vale que te avisemos ya: la cabeza te va a dar vueltas!

¿Qué se puede tomar para desayunar?

En Cataluña, el desayuno es un poco especial porque, a menudo, se lo pasan por alto y le dan más importancia al descanso que hacen hacia las 11 de la mañana, durante el cual se come algo salado, un bocadillo, por ejemplo, con un café. De todas maneras, las opciones para desayunar.

Las panaderías más emblemáticas de Barcelona

Si prefieres comer algo rápidamente, las panaderías son la opción perfecta. Puedes optar con los ojos cerrados por una de nuestras panaderías preferidas de Barcelona.

Una paella para comer

¡No hay viaje gastronómico a Barcelona que se precie sin paella! Por desgracia, varios establecimientos son auténticos engañaturistas. Para estar seguro de que saboreas una auténtica paella llena de sabor y elaborada a partir de productos frescos, lee nuestro artículo sobre la paella en Barcelona.

Un helado para merendar

¿Cómo que ya no tienes más hambre? ¡Estás de broma, espero! De vez en cuando hay que hacer un pequeño esfuerzo… ¡Dile a tu estómago que deje un poco de sitio para ir a saborear un helado que te va a encantar! Todas nuestras buenas direcciones figuran en el artículo sobre las heladerías de Barcelona.

Y si de verdad ya no puedes más, te proponemos un trueque muy especial: en vez del helado, prueba la horchata, una bebida estival que les gusta mucho a los barceloneses.

El chocolate a la taza para las tardes de invierno

Si te gusta el chocolate, prueba un suís en una de nuestras buenas direcciones: el chocolate a la taza recubierto de nata y que normalmente va acompañado de melindros (bizcochos de soletilla). ¿Ah, sí? ¿Eso engorda? ¡Déjate de rollos!

Es la hora del aperitivo

¡Mira, esto viene de perilla! Si te gusta la cerveza, la Fàbrica Moritz será tu paraíso.

¿Prefieres el vino? ¿Qué te parece una copa en una terraza frente a la iglesia Santa Maria del Mar? Pues entonces tienes que ir a La Vinya del Senyor.

Tapas o un restaurante gastronómico para cenar

Por la noche tienes varias opciones, ¿te gustan las comidas informales, picar en el plato del vecino y descubrir la tira de sabores? ¿Sí? Entonces, date el gustazo de cenar a base de tapas.

Si tienes un presupuesto más elevado, si tienes previsto tu viaje gastronómico con suficiente antelación y si deseas vivir una experiencia fuera de serie, ve a Tickets. Es el restaurante de tapas dirigido por Ferran Adrià, elegido mejor chef del mundo varias veces por su restaurante el Bulli, hoy cerrado.

• De todas maneras, ve con cuidado: Adrià es adepto a la cocina molecular: ¡algunos la adoran, otros la detestan! Infórmate bien antes para no salir decepcionado y no te olvides de reservar mesa en la web del restaurante varios meses ante de venir a Barcelona.

¿Te apetece una cocina menos rocambolesca? El Llamber será perfecto para la ocasión: por 40 ó 50 euros por persona saborearás unas tapas absolutamente fantásticas, acompañadas de deliciosos vinos.

¿Tienes gustos más sencillos? ¡No pasa nada! Estos deliciosos bares de tapas seguramente te irán la mar de bien.

Nota: rehusamos cualquier tipo de responsabilidad con respecto a la cantidad de calorías que hayas ingerido durante tu viaje a Barcelona. ¡No es culpa nuestra si no puedes resistir la tentación!